Vicious Records apuesta por la calidad
Para mucha gente la música es un divertimento, una forma más de dinamitar el ocio. Pero hay personas que entienden la música como algo mucho más serio y la acaban considerando una forma de vida, un auténtico vicio. Ése es el tipo de gente que trabaja en Vicious Records , un sello independiente de nuevo cuño cuya única meta es la calidad, la buena música en definitiva. Para las personas que están detrás de Vicious, lo importante es dar con figuras musicales que aporten algo y además ofrezcan perspectivas de durabilidad. Nada de grupos de quita y pon. Nada de productos de temporada.
Vicious Records nació en mayo del 2003 en Barcelona con un propósito bien claro: buscar caras nuevas para una panorama musical un tanto adormecido. La prioridad más absoluta del sello es descubrir nuevos artistas en el ámbito nacional para después lanzarlos en el mercado español y si es posible también en el europeo y latinoamericano. Sin limitaciones de estilos, sin prejuicios. El punto de mira de Vicious abarca el pop, el rock, el hip-hop, la música de fusión, la electrónica de baile, la canción de autor... Cualquier etiqueta es válida siempre y cuando el producto tenga la suficiente entidad para agradar al público. Pero los intereses de Vicious no se centran únicamente en el descubrimiento de nuevos valores. Otra de las opciones que contempla este sello barcelonés es licenciar a artistas de otras discográficas independientes europeas que sean afines a su credo musical, para luego distribuir sus discos en nuestro paÃs.
La primera figura que fichó Vicious es la explosiva cantante Maike Lüdenbach. Y es que cuando te comprometes de esta forma con la calidad, los éxitos siempre acaban llegando. Sólo para viciosos de la música.