Grupo Salvaje

Grupo Salvaje :: Mother Science
Realización vídeo::::: Nacho R. Piedra

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"Here Be Dragons"
GRUPO SALVAJE:
"Here be dragons" was an expression used by the first cartographers to describe the unexplored regions of the world. These far away lands were conjured up to be hostile, harsh and hazardous places. It was a clear warning signal, a call to pacify the adventurers heart. However, it is a known fact that the brave like to rise to the challenge and would see "Aquí hay dragones" as the ideal path to follow. This record is a tribute to dreamers and losers - who are more often than not the same people.Ernesto González was the lead singer of The Pribata Idaho. After the groups lamented separation, Ernesto joined forces with Carlos Perino, Javier Rincón, Óscar Feito and Pepe Hernández, celebrating the birth of Grupo Salvaje whose name pays homage to Sam Peckinpah's film The Wild Bunch and whose firm intention was to plunge into the most dazzling depths of darkness. "In Black We Trust", released in 2003, was a blaze. A blaze because the album, with a duration of a little more than thirty minutes, is made up of nine songs of staggering intensity; a blaze because without intending to be conceptual, it achieved a succinct unity, where Ernesto's powerful voice and the waves of the guitars are fortified on a rock solid rhythmic foundation.After a well deserved break, the quintet is back and are on top form, preserving their sense of identity, but with a surprising widening of perspectives. Inevitably, there are some things that havent changed. Abel Hernández (Migala, Emak Bakia, El Hijo) is in charge of the production once again, and he has also written the musical arrangement together with the group. Any other similarities? Sure, the last album was dedicated to Johnny Cash, June Carter, Sam Phillips and Joe Strummer, well this time the honour goes to the innovative guitarist Link Wray, who sadly passed away last November. The duration of the album remains moderate, 36 minutes in which the group encapsulates their intentions without allowing any space whatsoever for excess baggage. And of course, we can not forget the omnipresent instrumental tension and Ernesto's voice which at its best is without doubt on the same level as Kurt Wagner, Richard Hawley, Leonard Cohen and The Man in Black himself.We are not faced with a particularly optimistic record, but at least the inexorable and, the more often than not, tragic outcome of all these dreamers/losers is a result of their faith in their passions. So the simultaneous guitars in "The Worst Journey in the World" and "Scott's Arm" perfectly illustrate the attempts of Captain Scott's expedition to conquer the South Pole; "Ni Dios ni Amo" recaptures the old anarchist slogan to illuminate its impenetrable darkness; "A Disappointed Man" and "WNP" analyze weaknesses and disillusionments . However, it is probably through the panoramas of "La Hora de los Ocultos", "El Entierro de Bakunin" and "Cénit y Nadir" where we have scent of the dragons trail: beyond their robust rock, always embedded in folk, blues and country, Grupo Salvaje give free reign to their ambitions with unexpected instrumental developments Just there, on the other side, you can have a break from all your battles.
Jesús Llorente :: Acuarela Discos
"Aquí hay dragones"
GRUPO SALVAJE: "Aquí hay dragones"
Después de un paréntesis de algo más de dos años tras la edición de su álbum "In Black We Trust", Grupo Salvaje -el grupo comandado por Ernesto González, ex-líder de los añorados The Pribata Idaho- ha regresado con una nueva entrega titulada "Aquí hay dragones" expresión utilizada por los primeros cartógrafos para designar a las zonas inexploradas de la Tierra-. El álbum fue presentado en el pasado FIB (Festival Internacional de Benicàssim), y ahora se embarcan en algunas fechas más. Más confluencias que influencias, en "Aquí hay dragones" se puede detectar el inspirado eco de Tom Verlaine, Johnny Cash, el Leonard Cohen de "Death of a Ladies' man" y por supuesto, Elvis (sí, sin apellidos) y Bakunin. "Here be dragons", se podía leer en los mapas de los primeros cartógrafos para designar a las zonas inexploradas de la Tierra. Estas lejanas extensiones se presuponían ariscas, duras y llenas de peligros. Era aquella una clara señal de advertencia, una llamada al apaciguamiento del espíritu aventurero. Pero claro, todo valiente se enaltece ante los retos, y cuál sería mejor que el de contemplar ese "Aquí hay dragones" y considerarlo el camino a seguir. Es este un disco que homenajea a los soñadores y los perdedores, que casi siempre son los mismos. Ernesto González fue el líder de The Pribata Idaho. Tras el llorado final del grupo, Ernesto se unió a Carlos Perino, Javier Rincón, Óscar Feito y Pepe Hernández, celebrando el nacimiento de Grupo Salvaje en homenaje a Sam Peckinpah y con la firme intención de buscar la más brillante de las oscuridades. "In Black We Trust", editado en 2003, les salió redondo. Redondo porque el álbum, envasado en poco más de media hora, contenía nueve canciones de una intensidad asombrosa; redondo, porque sin llegar a una intención conceptual, se escuchaba como un bloque compacto, donde la poderosa voz de Ernesto y las oleadas de guitarras se hacían fuertes sobre una base rítmica pétrea. Aquel fue un disco de rock como ya se hacen pocos: clásico, abigarrado, emocionante. Tras un merecido paréntesis, el quinteto ha vuelto en plena forma, conservando las señas de identidad, pero con una sorprendente apertura de miras. Hay ciertas cosas que no han cambiado, eso desde luego. Abel Hernández (Migala, Emak Bakia, El Hijo) se ha vuelto a encargar de la producción, y ha escrito los arreglos junto al resto del grupo. ¿Más similitudes? Si allí el disco estaba dedicado a Johnny Cash, June Carter, Sam Phillips y Joe Strummer, aquí el recuerdo va para el innovador guitarrista Link Wray, tristemente desaparecido el pasado 5 de noviembre. También la duración es comedida, unos 36 minutos donde Grupo Salvaje condensan todos sus propósitos y no dejan el mínimo resquicio para el relleno. Y por supuesto no podemos olvidar la omnipresente tensión instrumental y una voz en estado de gracia, que se sitúa sin rubor entre las de Kurt Wagner, Richard Hawley, Leonard Cohen y el mismísimo Hombre de Negro. No estamos ante un disco particularmente optimista, pero al menos el inexorable y las más de las veces trágico desenlace de todos esos soñadores/perdedores se alcanza por la fe en sus pasiones. Así, las guitarras encadenadas de "The Worst Journey in the World"y "Scott's Arm" transmiten a la perfección los intentos de la expedición del Capitán Scott por conquistar el Polo Sur; "Ni Dios ni Amo" recupera un viejo lema anarquista para alumbrar su impenetrable oscuridad; "A Disappointed Man" y "WNP" analizan flaquezas y desencantos. Pero es quizás a través de los paisajes de "La Hora de los Ocultos", "El Entierro de Bakunin" y "Cénit y Nadir" donde más intensamente oleremos el rastro de los dragones: más allá de su fornido rock, cuajado siempre en folk, blues y country, Grupo Salvaje dan rienda suelta a sus ambiciones con inesperados desarrollos instrumentales... Justo ahí detrás podrás descansar de todas tus batallas.
Jesús LLorente :: Acuarela Discos
críticas actuación :: Festival de Benicàssim
En la categoría de imprescindibles se van situando, cada vez con mayor fuerza, los madrileños Grupo Salvaje. Densos y crepusculares, no aptos para almas sensibleras y superficiales, cuajaron un gran concierto que hizo olvidar a los escasos presentes que a unos metros Madness habían vuelto.
Manuel D. Abad :: www.elcomerciodigital.com
La banda de Ernesto González congeló durante un rato todo el ambiente hedonista y festivo del FIB, regalando los cuarenta minutos más áridos y ariscos del domingo. Con el apoyo de Abel Hernández ( El Hijo, ex Migala), su interpretación de "The Worst Journey in the World" fue imponente y en "Ni dios, ni amo" intimidaron, con el grupo al completo coreando la letra de la canción. Aires de desierto y blues en un grupo que apenas actúa y que aún así tiene un directo muy sólido.
Carlos González :: Rock De Lux (RDL.246 Septiembre 2006)
Por su parte Grupo Salvaje defendieron su "Aquí Hay Dragones", el segundo disco de los madrileños, con Abel Hernández, productor de su trabajo y ex Migala, encima del escenario en una magistral lección donde destacaba el gusto que desprenden sus composiciones a medio camino entre el mejor homenaje a Johnny Cash y el dramatismo fronterizo.
José M. Gallardo y Cristina Álvarez :: www.supernovapop.com
Esta noche Grupo Salvaje son siete hombres de negro. Hasta cuatro guitarras (les acompaña Abel Hernández, productor de su último disco "Aquí hay dragones") y un teclado arropan la voz cada vez más versátil de Ernesto González. No hay ninguna banda en España haciendo ésto. Quizás tampoco en el resto del mundo. Parecen unos Bad Seeds fronterizos, como cruzados con Calexico, invocando un blues desértico con dramatismo cinematográfico cuyos vapores alcohólicos saben más a tequila que a bourbon. Es una música picada por el veneno de una serpiente de cascabel.
Guillermo Z. del Águila :: www.fiberfib.com
En cuanto a Grupo Salvaje, luchar contra Madness y zZz es una tarea titánica, pero a pesar de todo, volvieron a estar mágicos, actuando para todos y cada uno de los que allí se habían acercado, sin importar el número. "Ni Dios Ni Amo" fue el punto álgido de una actuación en la que el gusto por las guitarras crudas y los sonidos de otra época volvieron a estar presentes con acierto, y es que "Aquí Hay Dragones" (2006) es un disco que apetece defender.
Alberto Castro :: www.popmuzik.es
En el lado estatal, un trío de oro alejado de los modos más tópicos del indie, pero con opciones verdaderas de ser una alternativa real, aunque sea comprensible que sus propuestas arriesgadas y difíciles para oídos poco avezados no gocen de las reverencias que otras más tópicas y facilonas sí encuentran, dada la nula cultura musical y el pésimo gusto que nos inunda por doquier. MANTA RAY, EL COLUMPIO ASESINO y GRUPO SALVAJE son el triunvirato de una alternativa real. (...) La densa sobriedad crepuscular de Grupo Salvaje va cada vez a más, a pesar de que muchos de los que se llenan la boca con Johnny Cash y otros nombres de lustre (que siempre quedan bien en conversaciones de altura ad hoc) les ignoren con la misma persistencia con la que ellos van forjando un repertorio tremendo.
Manolo D. Abab :: Ruta 66 (nº 231 Octubre 2006)
críticas actuación :: Tanned Tin
“(…) De quien volvímos a serlo (fans) fue de Grupo Salvaje, que nos dejaron del revés (…)”
Mondo Sonoro. (N..m. 135 Diciembre de 2006)
críticas actuación :: Primavera Club
“Neil Young viste de negro. Johnny Cash brinda por el honor de los olvidados. Y Grupo Salvaje pisan con firmeza la tierra de los dragones. Los directos apoyados en su segundo álbum están resultando grandiosos. En el Auditori, con un sonido casi perfecto, el madrileño Ernesto González guió a sus hombres de oscuro por la senda de los mejores iluminando las tinieblas de la heterodoxia country y las sombras de ese rock sin dios ni amo. Enormes.”
Xavi Cervantes :: Rock de Lux (N..m. 247 Enero 2007)
NOS HEMOS CLASIFICADO como...
* Mejor directo del año 2006 para Muzikalia
* Séptimo mejor directo del año 2006 para Go Mag
* Séptimo mejor directo del año 2006 para Rock de Lux
‘Aquí hay dragones’ ha sido elegido como:
* Cuarto mejor disco del año 2006 para Muzikalia
“Si desde niños todos soñábamos en parecernos a los héroes que en su dáa creaba John Ford, ellos prefieren la antítesis que Peckinpah nos mostraba en su "Wild Bunch", de donde toman su nombre. Y es que lo de Grupo Salvaje es una cuestión de actitud, de principios (…)”
Manuel Pinazo
* Décimo mejor disco del año 2006 para Rock de Lux
“(…) Y la banda que apostó todo a lo oscuro en su debut se enluta ahora hasta decir basta para irradiar música llena de vida y el habitual amor por el detalle. En un trabajo casi conceptual y de riqueza modélica. Ernesto González canta mejor que nunca, cincelando cada palabra y sin negar una sola influencia (…)”
Ramón Fernández Escobar
* Décimo segundo mejor disco del año 2006 para Go
“(…) Los ambientes áridos, las voces profundas y una indiscutible calidad musical son algunas claves de uno de los mejores discos nacionales de este año (…)”
Josep Martín