KLAMM

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KLAMM nace en Martorell (BCN) a finales de 1976. La primera formación está compuesta por guitarra, bajo y batería. Desde sus inicios se basan en la improvisación y la investigación, dentro de las corrientes del momento de new funk y cold wave, y tienen influencias tan destacadas como Can, Fripp, Eno, Gabriel, etc. Tras una actividad sin demasiadas concesiones a la proyección exterior, realizan durante 1982 numerosas actuaciones y completan la formación con otro guitarra y un percusionista. Empieza su incidencia en los diversos medios artísticos y de comunicación y culminan la proyección con la grabación de dos discos y la creación de su propio sello discográfico: KLAMM Records. KLAMM: una presentaciónEl hecho de que Klamm fuera una tribu organizada e inscrita en el Registro General de Tribus de 1976, fue sólo el punto de partida de una historia que desde ese momento trascendió evidentemente los medios comunicativos por los que se había desenvuelto hasta entonces: básicamente, medios de información entre tribus.De toda esa etapa, que hizo posible una gran confianza en sí mismos y en su momento, quedaban las opiniones que contenían los mejores elogios que se deparaban en la ciudad de Barcelona para cosas de ese tipo: grupos de viajeros de la mente, refundidores de influencias y rompedores de barreras de estilos. La participación de Klamm en el Sampler de UMPY con un tema llamado “Eish Anta” (siete minutos de geografía imaginaria) fue su primer trabajo publicado, justamente unos meses más tarde de haber comenzado a recorrer el circuito habitual urbano e interurbano. La incorporación de Tres, miembro de “ La T” (y participante autónomo en el citado Sampler) no tiene precio, y es como cuando se encuentran dos geográfos entre sí y comienzan a trazar mapas, colocar cordilleras, hacer sinuosos o no los ríos, inventar países, llanuras, selvas y luego diseñar equilibrios, sistemas solares y naves capaces de atravesarlos. Klamm con Tres fue algo a toda velocidad con tendencia al expresionismo, que vino haciendo sus músicas más incisivas, como si el color tratase de escapar con fuerza del límite impuesto por la línea, y finalmente desapareciera la línea o apareciera en otra parte (con lo que habríamos llegado a los mapas orográficos del fondo del mar mediante espectografías y en el batiscafo nos iríamos a dar una merienda). Los colaboradores para el LP “Africa Roja” provenían de los espacios inconmensurables de las músicas sin etiqueta y trabajaban en la idea KLAMM con la secreta intención de ver por fin la cara del capitan Nemo, sorprendiéndole mientras tocaba el órgano en su camarote-salón, o con la esperanza de nombrar y numerar cientos de mundos o ciudades de tres en tres. Klamm Records nace al mismo tiempo que el disco y es la primera célula que permitirá la estructura capaz de hacer llegar el producto a todos los rincones del mundo topográfico. Nadie pudo quejarse, porque esto que antes no estaba, de repente podías hacer una raya en la pared cada vez que lo ponías en el tocadiscos. Recomendado para usos psicodelícos o no, alterados o no, orgonómicos o no, funcionales o no, ambientales o tampoco. No tiene contraindicaciones, no produce intoxicación, a lo sumo un hábito que los laboratorios de Klamm Records venían estudiando y del que, en su último comunicado, nos confirmaban que, con toda seguridad, en el supuesto de que una persona comprara un disco “Africa Roja” y, por hábito, pusiera cada día una vez el disco completo y, en el caso de que la aguja de su equipo stéreo fuera sustituida con frecuencia, antes de encontrarse completamente deteriorado el plástico, ya habría aparecido el segundo LP de Klamm, y eso, debido a la buena calidad de la fabricación (por ejemplo, se presentó de forma manual, como los tirajes de música clásica, etc.). Y en el supuesto que el comprador sólo pusiera una cara cada día, ese tiempo sería exactamente el doble (a condición de poner el mismo número de veces ambas caras). En ese caso, el supuesto comprador llegaría, con los años, a tener la discografía de Klamm sin tener que cambiar ni siquiera el disco más antiguo por una nueva edición. Eso demuestra que en Klamm Records sabían lo que se hacían (y que allí se encontraban auténticos geógrafos oscuros y conocidos). Y eso es todo.Víctor Nubla.