Cuantas veces nos habremos preguntado por qué las cosas son en un momento determinado y que cuando ese instante pasa es inútil intentar engañarse a riesgo de chocar contra un muro más duro que tu propia insistencia por rehacer el pasado. Parece que la historia del ser humano es una constante por proyectarse en el futuro quien sabe si escapando del pasado o justo lo contrario, para volver a él. ¿Se han parado a pensar que por ese invento que es internet y que por sus descargas gratuitas pasa una corriente virtual por la que vuelve a circular toda nuestra vida en forma de concurso de preguntas rancio con calabaza de principios de los ochenta o videoclip hortera de cuando el sonido disco lo bailaban cuatro en España? El pasado es un espÃritu mal exorcizado que además es caprichoso y cuando le viene en gana emite pequeñas señales de luz a las que uno no puede sustraerse. Primero alguien te vuelve a hablar una mañana de un disco descatalogado en no sé que feria del coleccionista de los Megabeat, esa banda de tecno industrial de finales de los ochenta que abanderó los primeros años de la ruta valenciana -los más amables y aprovechables según casi todos- que tanto se ha desprestigiado con el paso del tiempo (pese a ser el único movimiento electrónico-clubber autóctono de nuestro paÃs). Dos dÃas más tarde, el invitado a tu programa de radio incluye Work 001 entre los discos a radiar esa noche de sábado. Es entonces, dos dÃas más tarde, cuando te llegan noticias de Madrid que hablan de una próxima doble entrega con versiones de Megabeat para un sello de nuevo cuño. Es entonces cuando es uno mismo quién se encuentra poseÃdo y necesita saber más sobre ese fenómeno que seguramente no nació con vocación de grupo pero para simplificar nos referiremos a él como Megabeat. Sonido Valencia.
Buen "bakalao" de Valencia.
Biografia:
HabrÃa que remontarse hacia el año 1982 para hallar los primeros escarceos serios de los miembros de Megabeat en el mundo de la música. En aquella época, en que ya se estaba cociendo en Madrid la famosa movida madrileña, en Valencia se iniciarÃa una movida similar y paralela, aunque de menor repercusión, y cuya caracterÃstica principal era que los grupos (Glamour, Tomates Eléctricos, Betty Troupe, Video...) practicaban un estilo más cercano al pop electrónico que los madrileños.
Fue por aquel entonces cuando Julio "Nexus" Pastor con sus sintetizadores (que ya habÃa hecho sus primeros pinitos en un grupo que practicaba un rock planeador cercano a Tangerine Dream) formó junto a Alfonso Aguado (voz, letras y guitarra) y Lino Oviaño (programación de ritmos, coros) un grupo llamado Europa que llegó a autoeditarse una cassette que ellos mismos distribuÃan. Más tarde entra José Luis MacÃas (sintetizadores, miembro de uno de los grupos más representativos de la escena valenciana, Glamour) y el grupo pasa a llamarse Última Emoción. Junto a MacÃas graban un disco de seis canciones que Ariola publicarÃa en 1983. El disco, titulado "Dos minutos de odio", no está nada mal, es una especie de cruce entre Azul y Negro y Ultravox, y suena mucho más interesante que posteriores trabajos de grupos valencianos, como VÃdeo o Betty Troupe, más comerciales y vulgares.
El disco se vende relativamente bien, y les permite actuar en sitios como el mÃtico Rock-ola madrileño, e incluso en Televisión Española. Sin embargo, Julio Pastor se cansa y abandona el grupo. Los restantes miembros todavÃa publicarÃan otra cinta, y después cada uno se dedicarÃa a sus proyectos personales, entre ellos el de Aguado, que forma la que luego se convertirÃa en una de las más famosas y atroces bandas españolas de pop pachanguero, Los Inhumanos, supongo que por todos conocida.
Por su lado, Pastor autopublica un par de cintas más experimentales, y más adelante conoce, a través de una tienda de instrumentos electrónicos, a Vicente Manero (más conocido como Gani Manero, apodo que proviene de su estancia en el grupo Objetivo GanÃmedes) y Fran Lenaers, ambos DJs, quienes ya estaban trabajando juntos en algunos temas que verÃan la luz en el primer disco del proyecto Megabeat, el LP "Megabeat 1", publicado en los primeros compases de 1990.Este primer disco se vendÃa inicialmente en clubes, en una tirada inicial de 500 copias sin portada ni tÃtulos, y empezó a tener cierta repercusión, especialmente gracias al "Struggle for pleasure", tema originalmente compuesto por Win Mertens. También contiene una versión del "Hinter den bergen" de Grauzone, cantada por Gani Manero. Después aparecerÃa otra tirada de 500 copias más, ya con la portada y con los tÃtulos impresos con un tampón en la galleta del vinilo. AparecerÃan también las primeras ediciones de los "Megabeat 2" y "Megabeat 3", con versiones de temas de Vangelis y Umo Detic. Sin embargo la mecha se prende con el tema "No puede ser (es imposible)", que les proporciona gran popularidad, y los discos anteriores vuelven a ser distribuidos ampliamente a través de su propia y flamante compañÃa discográfica, Megabeat Records, con el añadido de dos temas sin tÃtulo en el "Megabeat 1" que no figuraban en la edición original.
A partir de aquÃ, el grupo empieza a desarrollar una actividad frenética, y los discos, la gran mayorÃa de ellos mini-LPs con una cara a 45 RPM y otra a 33, se suceden uno tras otro prácticamente sin pausa, mostrando inicialmente fuertes influencias de Front 242 y Kraftwerk, adquiriendo personalidad propia paulatinamente, y utilizando distintos nombres tales como Megabeat, Sun Corporation o Interfront. Con este último nombre publican el maravilloso tema "Strange", que alcanza una considerable repercusión. A finales de 1990, se publica un CD ("Recopilación 1990") que recopila material extraÃdo de los seis primeros vinilos, todos ellos publicados durante el mismo año.Megabeat Records se divide en subsellos tales como Invisible, Neotek o Nezkabel, y empiezan a publicarse trabajos de otros grupos afines, como Teknika de Alicante (suyo es el tema "Yo no pienso en la muerte") o Boa Club (su "Fever Sax" se hizo bastante popular, fueron también conocidos como Toss y Espiral, y fueron co-autores junto a Chimo Bayo del famoso "Asà me gusta a mÃ"). También se fichan grupos de caracterÃsticas algo distintas, como Ut Supra (desde Salamanca, una especie de clónicos de los primeros Nitzer Ebb), o grupos de synth-pop como Deus Ex Machina o Último Destino. Asimismo, también aparecen discos de proyectos paralelos de los miembros del grupo, como por ejemplo la Division 31 de Gani Manero y su maxi "Dame Máquina".Algunos trabajos del grupo alcanzan repercusión internacional, un CD titulado "Es imposible" y con la misma portada que el 12'' de igual tÃtulo es publicado en USA por el sello Neotronik, y en Italia el sello Dig It publica material exclusivo del grupo ("Strategy Remix 93"), asà como un plagio del "Strange" realizado por algún proyecto italiano. Sin embargo, y a pesar del creciente éxito del proyecto, nunca se llegó a actuar en directo, debido a la complejidad técnica de llevarlo a cabo sin utilizar cintas pregrabadas.Finalmente, el fenómeno del sonido valenciano y la ruta del bakalao se populariza masivamente a nivel nacional, apareciendo incluso en los informativos televisivos. Chimo Bayo alcanza considerable repercusión internacional con una nueva versión de su "Asà me gusta a mÃ", y finalmente todo el asunto se acaba desbocando, debido al exceso de oferta, repetición de clichés y la crisis económica de 1992. Precisamente ese año, la corporación, que empieza a padecer sequÃa creativa, se disgrega. Gani Manero se queda con Megabeat Records y Julio Nexus con Invisible Records, quien todavÃa publica junto a Fran Lenaers un bonito picture 12'' ("Apology") bajo el nombre de Robotics (o también conocido como Spook) y dos trabajos bajo el nombre de TEUBE, proyecto éste dedicado a hacer versiones de sintonÃas de programas televisivos, contando con la ayuda de Salva Aleixandre (ex-Último Destino) y de Lino Oviaño (ex-Última Emoción) entre otros, y que los mantiene ocupados hasta finales de 1993. A pesar de éstas y algunas otras esporádicas reapariciones en escena, podemos decir que fue el final de Megabeat.Por fortuna, nos queda el recuerdo de una época y de unos discos que representan el legado más importante de la escena techno española. A principios del año 2000 una buena parte de este legado es recuperado por el sello valenciano Contraseña, al publicar un doble CD recopilatorio titulado de manera no demasiado acertada "Historia 1980-1990" que incluye una excelente selección de 30 temas, muchos de los cuales son la historia viva de la música electrónica española.