“…tenemos heridas, tenemos batallas,
laureles de gloria, coronas de espinas…
más de cien palabras, más de cien motivos
para no cortarse de un tajo las venas,
más de cien púpilas donde vernos vivos,
más de cien mentiras que valen la pena…â€
JoaquÃn Sabina
Estos son mis más de cien motivos por los que amo la vida.
Faltarán unos muchos, se añadirán otros tantos, sin duda tengo más de mil, millones seguro…
… más de cien motivos a los que agradecerles su existencia…
Mi familia, mi concepto de Dios, ver, tocar, sentir, la verdad dicha, reir, llorar, besar, ser besada, un abrazo puchurrado, los buenos amigos, mis hermanos de sangre (Vic, David, Mari, Haidet, Gerardo, Toño, Gla, mi Madre (toda ella), mis hermanos postizos, osease mis cuñados y cuñadas, la hermandad de Gladys, los destellos de ternura de mi Padre, los amores alucinados,le mio amore, la amistad de pollito, Zenén Zeferino,la calidez de Dianita, la calidad humana de Marco Escalona, la amistad del Lic. Guillén, la sabidurÃa del Dr. Castillo, los ojos del muchachote amable, la inteligencia de AgustÃn Girón, David Linares, Edgar, Alvaro González, la boca de Antonio, Tony Mapeye (y el borrego…), la sinceridad de Ursula Buchart, Héctor Castañeda, los mil ocho mil, la sencillez de May y Nerea, la alegrÃa de Karina Landa, los buenos maestros: Fco. Estrada, Jorge Ãlvarez, Irma Escobar, Mauricio Orozpe, mis chamacos (Sandy, Isaac, Vic, Monse, Cachi, Diego, Uriel, Sara, Miguel, Said, David, Yessi, Mirelle), Patricio Hidalgo y Andrés Flores, el soy sireno, el recuerdo de Roberto Decimista, los mails de Dennis Lebron, las manos de un hombre, la risa de Erendira, la ENAP, la forma de las raÃces de los árboles gigantes, un beso robado, la lluvia, el frio, la época de oro del cine mexicano, Cinema Paradisso, Memorias de Antonia, Amelie, Malena, Kevin Spacey, Audrey Tautou, Jeremy Irons, la poesÃa de Benedetti y Sabines, la obra de Giusseppe Tornatore, Wallace & Groumit, Srek, Monsters Inc, lo absurdamente divertido de la pelÃcula de Godzila, la filosofia de Mafalda, lo ingenioso de 31 minutos, Da Vinci, Buonarotti, Kalo, Escher, Lempika, la Giganta de Cuevas, el olor del papel, la acuarela, mi profesión, el internet, photoshop, after effects, final cut, dormir, dormir en el transporte público, los documentales de la vida animal, el vino tinto, el pulque y el torito veracruzano, la pasita (aunque sea poblana, ni modo…), el pozole de mi Madre, los tacos al pastor, el queso de Zenén, el picante, el spagueti de Gla, las sandigomas, los chocorroles, el helado de cajeta, la trasnochada en Papantla, mi primer viaje a Nanciyaga, el mar de noche, el mar con mi Madre, la navidad del 2003, el fraterno reencuentro en San Luis, la soledad en mi cuarto, mi cama, el rancho mi chomputadora, el son jarocho, la trova, la música en vivo, los Beatles, U2, la música brasileña, por supuesto, la música de Sabina, la voz de Iraida Noriega, Cien años de soledad, Momo, Donde el corazón te lleve, la soledad, los destiempos amorosos, la ilusión de una nueva amistad, la vida… y hasta aquÃ, todo aquello que cabe en un etcétera y que mi alz haimer no me permite enumerarlo…
I'd like to meet:
Algo que admirar...
Books:
Susanna Tamaro (Italia, 1957)
Donde el corazón te lleve (fragmento)
" Cada vez que te sientas extraviada, confusa, piensa en los árboles, recuerda su manera de crecer. Recuerda que un árbol de gran copa y pocas raÃces es derribado por la primera ráfaga de viento, en tanto que un árbol con muchas raÃces y poca copa a duras penas deja circular la savia. RaÃces y copa han de tener la misma medida, has de estar en las cosas y sobre ellas: sólo asà podrás ofrecer sombra y reparo, sólo asà al llegar la estación apropiada podrás cubrirte de flores y de frutos. Y luego, cuando ante ti se abran muchos caminos y no sepas cuál recorrer, no te metas en uno cualquiera al azar: siéntate y aguarda. Respira con la confiada profundidad que respiraste el dÃa que viniste al mundo, sin permitir que nada te distraiga: aguarda y aguarda más aun. Quédate quieta, en silencio, y escucha a tu corazón. Y cuando te hable, levántate y ve donde él te lleve.