La Criolla Froderband comenzó a formarse hacia finales del año 2005. Hacía poco tiempo Adolfo Frodermann, cantautor santiagueño había arribado a Buenos Aires desde San Salvador de Jujuy, ciudad donde había vivido diez años y en la que formó parte de grupos como Makiwan, Contracanto y La Búsqueda. Cargado con un puñado de canciones de su autoría y muchas ganas de hacerlas conocer, empezó con un proyecto al que pronto se unieron otros músicos amigos para formar el germen de lo que sería La Criolla Froderband. La banda fue experimentando en diversas formaciones hasta decantar en una configuración con músicos de variada formación y distintos registros sonoros con guitarra, bajo eléctrico, piano, flauta traversa y percusión. Su primer CD fue grabado en vivo en el año 2008. Este trabajo discográfico fue editado en forma independiente con gran aceptación del público que sigue a “La Criolla” por Buenos Aires.
Actualmente, se encuentran dedicados a la difusión de "Semilla” (su primera placa) y a la gestación de su segundo trabajo discográfico.
La Criolla Froderband es hoy un grupo vocal e instrumental. Su repertorio está formado en su mayor parte por canciones propias, con un sonido fresco y nuevo pero sin perder la esencia de la música folklórica argentina que se expresa por medio de ritmos del noroeste argentino.
Es un avión! -dijo un señor de anteojos-
Es una nube, no hay duda! -farfulló un viejo hippie sesentoso-
Es un pedazo 'e cielo en la tierra! -dijo una morera-
Es una canción, un fusil! -cantó un poeta cubano-
No es nada! -gruñó un escéptico-
Son cinco locos, no los entiendo! (una señora sorda)
Dos parejas de bailarines no decían nada, mientras giraban como
derviches ululantes...
Entre medio del gentío, una ancianita casi transparente logró hacerse notar:
"cállense!!! déjenme escuchar!!! ¿no ven que sólo son cinco muchachos
cantando lo que más profundo sienten?..."
En el grupo se hizo un profundo silencio, mientras detras de ellos,
La Criolla Froderband daba lo mejor de sí.
Todos se volvieron hacia el escenario y ya dejaron de dilucidar qué era
lo que estaban presenciando, sólo se limitaron a escuchar
mientras cada uno revisaba en su interior lo que más profundo sentía.-
A.F.
It's a plane! -a gentleman of eyeglasses said-.
It's a cloud, no doubt about it! -a hippie fromt the 70's mumbled-.
It's a piece of heaven on Earth -a mulberry tree said-.
It is a song, a gun! -a Cuban poet sang-.
It's nothing! -a skeptic growled-.
They are five lunatics, I don't understand them! (a deaf lady).
Two pairs of dancers did not say anything, while they were spinning like ululant dervishes.
Among the crowd, an almost transparent old lady managed to be noticed: "Shut up! Let me listen! Don't you see that's only four boys singing what deeper they feel... "
In the group a deep silence became, while at the stage, La Criolla Froderband's boys were giving the best of themselves.
Everyone started looking towards the stage and stopped trying to explain whatever they were looking at, they were only limited to listen while each one of them reviewed in its inner self what deeper felt. -
A.F.