EL TERRON Y GUIJARO (WILLIAM BLAKE)
"El amor no anhela complecerse a sà mismo
ni por si mismo se inquieta,
en cambio al otro da sosiego, y construye un cielo en la desholación
del infierno."
Asà cantaba un diminuto Terrón
de arcilla
pisoteado por las patas del ganado,
pero un Guijarro de cañadón
murmuró estos versos apropiados:
"El amor solo busca darse el gusto,
y encadenar al otro en su deleite,
se regocija con el desconsuelo ajeno,
y construje un infierno a expensas del cielo.