MAY DAY VIGO

El conjunto rockero vigués May Day, comenzó su reciente historia de la forma más clásica; entre las salas de conciertos de la ciudad. En mayo de 2006, un directo reunió en cartel a los grupos Syra y Heaven, ambos diferentes; los primeros experimentales e instrumentales y los segundos con una tendencia al hard rock melódico. El guitarrista de Syra era Rubén Reinaldo, un joven fiera de las seis cuerdas que despuntaba con veinte añitos y con unas ganas locas de comerse el mundo. El bajista de Heaven era Robert Martínez, todo un veterano de la escena musical viguesa, que había sido integrante de exitosos grupos maqueteros como Callejón sin Salida, Las Rockas o Control Z entre otros. Durante aquel concierto, surgió una química muy especial entre los dos músicos, que con el tiempo se convertiría en la base de un proyecto musical conjuntamente. Así, a mediados del año siguiente, los dos encontraron el momento perfecto para estrenar la nueva etapa en común. Robert comenzó a demostrar que además de bajista, era un consumado vocalista y, junto a la capacidad compositora de Rubén, ambos comenzaron con entusiasmo a trabajar duro en nuevos temas y en la difícil tarea de buscar músicos. En Octubre de 2007,tras unos agotadores meses de pruebas, anuncios y muchos ensayos con claqueta electrónica, apareció, como caído del cielo, un baterista con una pegada alucinante, una riqueza rítmica de lo más variado y el suficiente amor por la música como para ir a ensayar desde Ponteareas, Celso García. Con Celso, el proyecto comenzó a tomar forma y los temas cobraron vida y frescura, pero todavía quedaban algunas sorpresas por llegar. Poco después, Robert se reencontraría con un antiguo ex compañero del grupo Las Rockas, el cantante Iñigo Perfecto. Casualmente Iñigo le contó que deseaba volver a la música tras unos años de parón y que andaba buscando gente. El resultado de aquel encuentro no se hizo esperar e Iñigo colaboraría con el grupo grabando posteriormente el primer trabajo autoeditado: “Con Rock, Por Favor”. Mucho antes de esto, Robert se acordó de que conocía a un excelente guitarrista al que podría interesarle unirse al grupo y que también estaba deseoso de volver a los escenarios. Lo citó un día en el ensayo para comprobar si hacía buenas migas con Rubén y el éxito de aquel encuentro fue fantástico; Rubén estuvo encantado de trabajar con Mandi Díaz, toda una leyenda de la guitarra en Vigo, ex integrante de bandas míticas como Soga y Averno, y con una sensibilidad en sus dedos sin duda digna de admiración y respeto. Tras la primera grabación, la banda quedó finalmente formada; estableciendo como miembros fijos a Robert, Mandi, Celso y Rubén, quienes actualmente defienden en directo los temas a la vieja usanza: personalidad, contundencia y, sobre todo, melodía.