About Me
Supongo que hay que aprender a desechar. Un buen músico, como en general cualquier artista, se le conoce más por lo que publica que por lo que echa al cesto de la basura. Horas de ensayos frente a algún espejo que le haga perfeccionar posturas que rozan lo imposible o afinaciones de perfecta armonÃa en algún rincón de la casa. Asà son los cantautores. Personas románticas que viajan en universos paralelos y lo plasman con guitarra y voz. Mundos que critican el actual orden de las cosas. Lo satirizan, lo acercan hasta que los puedas tocar, te lo susurran al oÃdo en un tú a tú sin medios de comunicación en el camino, sin más tecnologÃa que el vibrar de las ondas en un micrófono. El único requisito es que participes en el feed-back que te propongan en los conciertos: con silencios; risas; muecas; palmas; silbidos, o sumándote a los estribillos…El sur de España, con una idiosincrasia peculiar que te hermana y envuelve de manera mágica con los que están a tu alrededor, ha teñido la forma de ser de Manuel Ruiz, nacido en Sevilla en 1980. Con un corazón grande y temperamental siempre ha estado vinculado a la ayuda de los más jóvenes. Según su propia definición, no es una persona alta, más bien “de estatura estándarâ€. Su pelo ensortijado muestra una persona intranquila por los problemas actuales aunque sosegada a la hora de hacerlos llegar al espectador. La forma de vestir es un claro exponente definitorio de la personalidad de cualquiera, sin embargo, la mudanza constante de ropas que envuelven la verdadera esencia de Manuel, persona tÃmida en los asuntos más personales, te aseguran que sus motivaciones antes que fÃsicas, son sociales.Al igual que la del Ché, su barba desprende un toque rebelde. No fuma ni tiene acento argentino. Sin embargo, sus revoluciones musicales las idea entre centenares de libros, que cada semana conquistan una nueva cima en su habitación, y decenas de Cds de cantautores, flamenco o jazz. Su estilo personal se ha visto influenciado por raÃces flamencas de la mano de Fernando Ruiz, su tÃo, que le enseñó con sólo 10 años la convivencia, el respeto y el amor a LucÃa, su guitarra. Actualmente tiene un grupo de sevillanas y rumbas con el nombre A Mi Aire. Del flamenco a la música de autor podrÃa ser el titular para este joven músico.Su pasión por los cantautores se fraguó en un espacio donde el tiempo se detiene. Un piano negro de pared que destaca sobre un muro blanco, una chimenea que acude en invierno a auxiliar a las personas que buscan un espacio donde reflexionar sobre la vida, y un pequeño escenario. En él, un foco que alumbraba todas las semanas a un desconocido por aquel entonces JoaquÃn Calderón y a su padrino en Sevilla, Alfonso del Valle. Era y es, aunque los tiempos han cambiado mucho, La CarbonerÃa. Fue entonces, cuando la curiosidad de Manuel Ruiz, se adentró en lo que serÃa su libro de partituras personal. El amor, gran musa de poetas, pintores y cantantes, asà como la inmigración, el miedo a tomar decisiones, la soledad, la economÃa que destierra a miles de personas en paÃses subdesarrollados o el volver a empezar después de una derrota, son algunas de las letras que este sevillano transforma en canción.En Triana, su barrio, el que durante tres años le proporcionó las tablas necesarias para iniciarse fue el Bar AnÃbal, en la calle Castilla, del que guarda un grato recuerdo. Ha pasado por numerosos escenarios y ciudades, como La Tertulia en Granada, el Bandush101 en Madrid, Las Palmas de Gran Canaria, el Pay-Pay en Cádiz, Écija, Lora del RÃo, Morón de la Frontera, Salesianos de Sanlúcar la Mayor o el Colegio Mayor Don Bosco, la Alameda con el mÃtico bar El Bruja, el Hache Hache en la calle Torneo, conciertos solidarios y tantos otros rinconcitos que han escuchado su voz confirman los más de 10 años componiendo y cantando. Este músico entre otros méritos tiene el premio al mejor cantante de la Universidad de Sevilla en 2007 y participar con un Himno Pascual en la grabación del disco Himnos Pascuales vol.2, financiado por la Pastoral Juvenil de la Inspectoria Salesiana de Sevilla. Además, ha compartido escenario con artistas como los Cantores de HÃspalis, Isabel Fallos o Kiko Veneno.“La música que hago es para ser escuchada y para que reflexionen sobre lo que escribo. No pretendo que sea comercial. Simplemente que sea entendida como un canto a la vidaâ€, afirma Manuel.Estos RUIDOS pretenden formar parte de vosotros.