Mauricio Paez

La verdad no puedo hablar de fechas, no porque no pueda, sino porque esto empezó hace tanto tiempo que ya no recuerdo muy bien como fue....solo se que tuve la fortuna de encontrar la música, por así decirlo, pues jamás sabré si fue ella quien me encontró.
Hace ya varios años en una tarde cualquiera apareció Mario (uno de los de la pandilla) cargando una guitarra, se acercó a nosotros y sin querer cambió mi vida; ese instante marcó un antes y un después....no pasó mucho tiempo antes de que todos nos hiciéramos de una guitarra. Sin embargo, la mayoría desistió y fuimos muy pocos los que nos entregamos de lleno a tocar....y es que a pesar de la torpeza con la que hacíamos acordes y melodías, sentíamos como se alimentaba el alma con cada sonido, como se detenía el tiempo en el silencio, como latían nuestros corazones; y así pues nos dedicamos a soñar con hacer música....empezamos a reunirnos cada vez más seguido en casa de Oscar, aprovechando cada ocasión que teníamos para escapar del colegio, y así, sin darnos cuenta, con el paso del tiempo nos enamoramos perdidamente de ella y desde entonces ese sentimiento solo ha crecido.
Con el vaivén del tiempo muchos se fueron quedando atrás, otros tomaron rumbos diferentes y algunos simplemente desaparecieron, pero jamás te quedas solo; por un golpe de suerte conocí a Ricardo Andrés Londoño, un tiplista de la ASAB, quien sin esperar nada a cambio dedicó muchos momentos de su vida a enseñarme y logró con su manera de ser y de concebir el mundo hacer de mi vida música…..gracias por eso Maestro....con el tiempo fueron apareciendo en el camino muchos artistas con los que tuve la oportunidad de trabajar y compartir todas sus locuras y sueños; sueños que a su vez se hicieron parte de los míos….y lo seguirán siendo siempre; más que compañeros de música nos hicimos amigos de viaje, “parceritos”, esos que me llevaron a un mundo del que ya no me quiero alejar jamás….Jeffer, Fercho y Negro gracias por estar siempre dispuestos a soñar conmigo…..pase lo que pase ustedes siempre serán “los primeros de la lista”.
Ya con las ganas bien puestas inicié la búsqueda de un sonido propio; y pasó mucho tiempo antes de lograrlo, pero nada de esto hubiera sido posible sin Carlos Daniel Molano; estudiante de la Academia Fernando Sor y un hombre con una pasión desgarrada, con quien iniciamos a trabajar en la producción de las canciones entre risas y humo de cigarrillos, logrando al fin, después de mucho trabajo, estas historias hechas música......
Disfrútenlas.....son para ustedes.
Layout Created at KillerKiwi.net