I'd like to meet:
Casi siempre están los dos. Uno es el camino de ida, en el que se proyectan las ilusiones y los deseos, trayecto de lo que podrÃa ser, espera y anhelo. El otro es la senda de regreso, porque siempre se torna a quienes somos y a la realidad, vÃa crucis de asunciones y penitencia por soñar lo que no era nuestro destino. Sólo que, alguna vez, creà que ambos viajes se confundÃan. Como si fuese imposible discernir si ya no sueño o si la realidad - por fin, alguna vez - me regala un pedazo de paraÃso terrenal. No sé, será que me confundo, será que estoy aún entre marea y, agazapado, aguardo un golpe de realidad resuelto a obligarme a emprender la marcha de regreso...