Nacho; El Blues de Slowy

Músico de guardia, guitarrista con oreja y media, melómano tradicional, compositor en paro por su voz, arpegiador de lágrimas musicales, descubridor de grandes talentos y mejores personas. Nací a la vez que mi banda favorita, 77 es un buen año. Desperté en una ciudad que todos llaman Valencia, ciudad que cada vez entiendo menos y me asusta más. Me mal crié con los 40 y las pastis de Chimo Bayo hasta que cayó en mis manos un recopilatorio de Dire Straits, aquel día crecí dos metros y me hice mayor. Nada volvió a ser igual. Con ellos me emocioné, sentí y descubrí lo que es la música y el rock. Knopfler siempre estará arriba, sin duda para mí el mejor. Enseguida vinieron más. Led Zeppelin, Deep Purple, Bruce Springsteen, Ac/Dc, Pink Floyd me curtí con los rockeros sagrados. Hasta que el BLUES llegó a mí, encrucijada de caminos. Robert Johnson, Albert Collins, Albert King, Jimi Hendrix,Otis Rush, Robert Cray, Eric Clapton, BB King, Son Seals, Lightin Hopkins, Leadbelly... Tuve mis escarceos con los cantautores españoles más clásicos como Sabina, Hilario Camacho, Krahe, Ismael Serrano y me dejé querer por algunos grupos de rock nacional como Rosendo, Platero y tú, Los Suaves y Extremoduro. Todo eso pasó pero aún Knopfler sigue estando ahí y me acerco a cualquier país del mundo para poder disfrutar de su magia. También el Blues sigue muy presente con nuevas incorporaciones que han pegado muy fuerte en mi discografía como SRV y el más grande de todos; Rory Gallagher. Me siguen emocionando ciertas cosas de Fito & Fitipaldis, Los Del-Tonos, Los Lunáticos, M-Clan, Revolver y eso enlaza con mi otro gran pálpito del corazón a parte de Mark Knopfler. El genial Quique González. Ya no puedo vivir sin él, se ha convertido en mi BSO, en mi manera de pensar, en ese campo electromágnetico que me ata a la persona que más quiero en el mundo. No me importa los kilómetros que hayan de por medio si al final hay un escenario y sobre él está Quique con su música. Gracias a él he descubierto a Josh Rouse, a Wilco, a Damien Rice, y sobretodo a Ryan Adams, sin palabras. Y ese soy yo musicalmente hablando, un compendio de todas esas cosas, un poquito de todo. Soy guitarista aficionado, cuando puedo maltrato a mi Strato, intento hacerla llorar un poquito. Me gusta componer, pero mi nula voz me impide ser algo más valiente, las letras siempre quedan para la papelera. Prometo algún día grabar algo decente. De momento me conformo con cantárselas a la ventana abierta y fantasear con que alguien las escucha y le gusta. Si te apetece pásate de vez en cuando por aquí, será un placer tenerte cerca y poder aprender contigo. Gracias por leerme. Nacho