Partes individuales sin funcionamiento, inhibidas por el cotidiano andar, energias y relaciones que unidas dan forma y funcionamiento al mecanismo antes controlado y ahora sin la capacidad de parar.
Un simple parpadeo es necesario, para dejar escapar circunstancias y volver todo blanco y negro, llenar vacios y girar dentro de innumerables soluciones.
Dependencia innecesaria pero incalculable, al momento de iniciar una secuencia y partir, crecimiento cultivado de acciones envolventes que permiten simplemente viajar. Nuestras neuronas se revolucionan, creando efectos luminosos en nuestra retina, se enredan, se rasgan y enloquecen haciendo aparecer nuevas imagenes y sensaciones antes desconocidas.
Un decorado de nuevos colores...