-Teatro macabro, oscuro, sangriento, con atmósferas lóbregas, quedaras estupefacto ante lo inesperado, preséncialo bajo tu propio riesgo.
¡El Grupo nació en Irapuato Guanajuato, México, fundado por Mauricio RamÃrez y Marco Antonio Rizo gracias a los ideales radicales y de cambio que querÃamos imprimir en el entorno teatral de nuestra ciudad, querÃamos tener un grupo teatral el cual tuviera impresa nuestra forma de pensar y de vida, creÃmos que era necesario crear una compañÃa de teatro que fuera totalmente diferente a las escasas (nulas) compañÃas de teatro en Irapuato. Esta compañÃa ha crecido sin el apoyo de instituciones culturales y(o) gubernamentales asà como de personas que se sienten pioneras o vacas sagradas de la cultura; especÃficamente hablando del teatro en esta ciudad. Asà pues, henos aquÃ, mundo teatral, con los brazos abiertos a cualquier propuesta o convocatoria, lo que no nos mata, nos hace mas fuertes, gracias a todos aquellos que nos han hecho ir contra corriente, ustedes saben quienes son.
Theatre du Grand Guignol
En la calle Chapetal de Paris hay un edificio con Ãngeles pintados en el techo y diseños góticos en sus puertas, y que fue un convento profanado durante la Revolución Francesa. El 13 de Abril de 1897 Oscar Metenier, un empresario de variedades, compro aquel inmueble y fundo ahà el Theatre du Grand Guignol. Su intención era aterrorizar al público con un programa de ocho obras cortas sobre torturas, asesinatos horrendos y violaciones.
La clave del éxito fueron sus realistas efectos especiales. Se usaban órganos y sangre de animales, además de maniquÃes y prótesis para simular las amputaciones. Una de las actrices de la compañÃa, Paula Maxa, narro en sus memorias como el público chillaba histérico cuando un actor simulaba sacarle un ojo a una joven. Maxa contó también que, durante su sangrienta carrera, fue "asesinada" 10,000 veces y de 6,000 maneras diferentes.
En cada representación habÃa decenas de personas afectadas por desmayos y lipotimias, y en los descansos se abrÃan las puertas y ventanas, para que el aire fresco ayudara a los mas impresionados a recuperar el sentido. Según el historiador Mel Gordon, inicialmente, el publico que acudÃa a este espectáculo era "el mismo que antes se divertÃa en los teatros de cera y las ferias de fenómenos humanos". Pero su fama acabo atrayendo a un auditorio de gente burguesa y sofisticada, ansiosa de emociones fuertes. Llegó un momento en que nadie iba a Paris sin asistir a una representación del Theatre du Grand Guignol; y entre sus visitantes los hubo tan ilustres como los reyes de Grecia, el sultán de Marruecos y el joven Ho Chi Minh.
Aunque el éxito de la compañÃa traspaso las fronteras de Francia, para convertirse en una franquicia del horror con sucursales en Nueva York y Londres, el teatro cerró en 1964 por la competencia de un enemigo que resulto imbatible: el cine.
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